Resumen Latinoamericano, 18 febrero 2019
La embajada
de Estados Unidos en Buenos Aires se volvió a convertirse en el epicentro de
una gran movilización de repudio al injerencismo yanqui en Venezuela
Bolivariana. Como siempre ocurre en estos casos, el grito histórico contra el
imperio se escuchó con fuerza, cuando miles de gargantas corearon “Yanquis go home” y “Saquen sus manos de Venezuela”.
Con pancartas
alusivas a resistencia del pueblo y el gobierno en la patria de Bolívar y Hugo
Chávez, a la que se sumaron numerosas banderas de ese país y otras con el
rostro del Che, Fidel, Evita y Vilma Espín, alrededor de 5000 personas hicieron
oír su solidaridad con el presidente Nicolás Maduro y el pueblo bolivariano.
Organizaciones sociales de un amplio espectro y también militantes de las dos
CTA, ATE y otros gremios combativos fueron parte de la marcha que avanzó a
media tarde y bajo un calor agobiante, desde Plaza Italia hasta la Embajada.
Las distintas columnas fueron rodeadas por efectivos policiales que durante
todo el trayecto desplegaron un operativo injustificado y provocador como
acostumbra el Ministerio de Seguridad, dirigido por Patricia Bullrich.
Una vez frente a la Embajada de EE.UU, se leyó un documento firmado por las
organizaciones convocantes y se repitieron las consignas antiimperialistas y de
solidaridad con Venezuela Bolivariana.
Texto
del Documento leido frente a la embajada:
¡YANKEE
GO HOME!
Fuera Trump de Venezuela
Los abajo
firmantes rechazamos la escalada de presiones y acciones del Gobierno de los
Estados Unidos para preparar una aventura militar disfrazada de «intervención
humanitaria» en la República Bolivariana de Venezuela.
El Gobierno
Revolucionario de la República de Cuba ha denunciado públicamente que, entre el
6 y el 10 de febrero de 2019, se han realizado vuelos de aviones de transporte
militar hacia el Aeropuerto Rafael Miranda de Puerto Rico, la Base Aérea de San
Isidro, en República Dominicana y hacia otras islas del Caribe estratégicamente
ubicadas, seguramente sin conocimiento de los gobiernos de esas naciones, que
se originaron en instalaciones militares estadounidenses desde las cuales
operan unidades de Fuerzas de Operaciones Especiales y de la Infantería de
Marina que se utilizan para acciones encubiertas, incluso contra líderes de
otros países.
Medios
políticos y de prensa, incluso estadounidenses, han revelado que figuras de
ultra-derecha de ese gobierno, con una larga trayectoria de acciones y calumnias
dirigidas a provocar o alentar guerras, como el Asesor de Seguridad Nacional
John Bolton, el Director del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad
Nacional, Mauricio Claver-Carone, con la participación del Senador de la
Florida, Marco Rubio, diseñaron, gestionaron el financiamiento y organizaron
directa y detalladamente, desde Washington, el intento de golpe de estado en
Venezuela mediante la ilegal autoproclamación de su títere pro-imperialista,
Juan Guaidó.
Son ellos
mismos los que, personalmente o a través del Departamento de Estado, vienen
realizando presiones brutales contra numerosos gobiernos para forzar su apoyo
al llamado arbitrario a nuevas elecciones presidenciales venezolanas, mientras
promueven el reconocimiento al usurpador que apenas cuenta con 97 mil votos
como parlamentario, frente a los más de 6 millones de venezolanos que el pasado
mes de mayo eligieron al Presidente Constitucional Nicolás Maduro Moros.
Tras la
resistencia al golpe ofrecida por el pueblo de Venezuela, demostrada en las
masivas manifestaciones de apoyo al Presidente Maduro y en la lealtad de la
Fuerza Armada Nacional Bolivariana, el Gobierno de los Estados Unidos ha
intensificado su campaña política y mediática internacional y recrudece las
medidas económicas coercitivas unilaterales contra Venezuela, entre las que
puede citarse el bloqueo en bancos de terceros países de miles de millones de
dólares pertenecientes a Venezuela y el robo de los ingresos de las ventas de
petróleo de esa hermana nación, lo que está provocando graves daños
humanitarios y duras privaciones a su pueblo.
Junto a este
cruel e injustificable despojo, EE. UU. pretende fabricar un pretexto
humanitario para iniciar una agresión militar contra Venezuela y se ha
propuesto introducir en el territorio de esa nación soberana, mediante la
intimidación, la presión y la fuerza, una supuesta ayuda humanitaria, que es
mil veces inferior a los daños económicos que provoca la política de cerco,
impuesta desde Washington.
El usurpador
Guaidó declaró desvergonzadamente su disposición a reclamar una intervención
militar de Estados Unidos con el pretexto de recibir dicha «ayuda humanitaria».
Altos funcionarios estadounidenses recuerdan cada día, con arrogancia y
desfachatez que, en relación con Venezuela, «todas las opciones están sobre la
mesa, incluida la militar».
Los pueblos juzgarán severamente una nueva intervención militar imperialista en
la región y la complicidad de quienes irresponsablemente lo acompañen.
Se decide hoy
en Venezuela la soberanía y la dignidad de América Latina y el Caribe y de los
pueblos del Sur. Llamamos a impulsar una movilización internacional en defensa
de la paz en Venezuela y en la región. Expresamos nuestra bienvenida y apoyo al
Mecanismo de Montevideo, iniciativa de México, Uruguay, la Mancomunidad del
Caribe (CARICOM) y Bolivia, que busca preservar la paz en Venezuela basado,
como dice su reciente Declaración, en los principios de no intervención en los
asuntos internos, la igualdad jurídica de los Estados y la solución pacífica de
controversias. Saludamos la favorable acogida a dicha iniciativa por parte del
Presidente Maduro Moros y la comunidad internacional y expresamos preocupación
ante el rechazo categórico del Gobierno estadounidense a las iniciativas de
diálogo promovidas por varios países, incluida esta.
Reiteramos
nuestra firme e invariable solidaridad con el Presidente Constitucional Nicolás
Maduro Moros, la Revolución bolivariana y chavista y la unión cívico-militar de
su pueblo, y hacemos un llamado a todos los pueblos y gobiernos del mundo a
defender la Paz y a oponerse unidos, por encima de diferencias políticas o
ideológicas, para detener una nueva intervención militar imperialista en la
América Latina y el Caribe que dañará la independencia, la soberanía y los intereses
de los pueblos del Río Bravo a la Patagonia.
Adhieren:
Agrupación Envar El Kadri – Peronismo de Base
Agrupación La Don Juan Manuel
AUNA – Asociación para la Unidad de Nuestramérica
ATE Capital
Barricada TV
Casa de la Amistad Argentino – Cubana de CABA
Casa de la Amistad Argentino-Cubana-Venezolana de La Matanza
Coordinadora Resistir y Luchar
Corriente Nacional Martin Fierro
Corriente Peronista Descamisados
CTA Autónoma
CTA de los Trabajadores
Colectivo Las Farías
Confederación General de Jubilados, Pensionados y Adultos Mayores
Federación Gráfica Bonaerense
Federación Juvenil Comunista
FORJA
Frente Patria Grande
Grupo Por Soberanía (GPS) – combatientes de Malvinas
Kolina (Corriente de Liberación Nacional)
La 5 de Noviembre
La Cámpora Vicente López
Liga Argentina por los Derechos Humanos
Movideme J.W. Cooke
Movimiento de los Pueblos – Por un feminismo socialista desde abajo (Corriente
Popular Juana Azurduy / Frente Popular Darío Santillán / Frente Popular Darío
Santillán-Corriente Nacional / Izquierda Latinoamericana Socialista /
Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social / Movimiento 8 de
Abril)
Movimiento Octubres
Movimiento Territorial Liberación
MPE – Movimiento de Participación Estudiantil
Partido Comunista
Partido Miles
Partido Piquetero
Peronismo 26 de Julio
Resumen Latinoamericano
Socialistas para la Victoria
Venceremos – Partido de Trabajadorxs
Asamblea Popular de La Puna, Jujuy
Encuentro “Venezuela Se Respeta” La Rioja
OLP – Simón Bolívar
CONAICOP
El Hormiguero
Frente Productivo Nacional
Frente Juvenil Hagamos Lo Imposible
Centro de Estudiantes del Instituto Universitario Nacional Madres de Plaza de
Mayo
CANPo (Corriente Agraria Nacional y Popular)
Colectivo por el AL.B.A de La Matanza
Frente Transversal Nacional y Popular
No hay comentarios.:
Publicar un comentario